Alas de mariposa quebrantada

Ya sé amor,
en esta hora es siempre todavía,
lo sé... aún no dices nada.
No hay palabras,
de frente nos miramos.
Tú y Yo...

En medio de la nada nos pensamos.
Un suspiro me lleva de tu mano.
Aliento de rosas rojas
despierta la mañana tu recuerdo,

palabras como lluvia
que acaricia y da calma.
Luna de agua, besos dulce miel.

Estoy mirándote, amor;
al fin de tantas horas sin un dueño
mi corazón enmudece ante tu luz.

No hay más que esta hora muda
en que dormimos y soñamos
y reimos solos... Soy naúfrago de deseos,
de sueños que gimen...

Mis alas de mariposa quebrantada
han levantado su vuelo a ningún sitio,
sin ninguna estrella;

a esta hora concreta
en que el mar azul se lamenta.